Cuando el
italiano Edmundo de Amicis publicó en 1886 Coure
(Corazón), la obra alcanzó el éxito inmediatamente. Primero en Italia y
después en el mundo. Escrita de forma un tanto original, esta novela (que no
parece pero no hay otra forma de llamarla) fue el intento de crear un pegamento
adecuado para unir más a la recién unificada Italia fomentando el patriotismo
allí donde hacía más falta: en los niños. Ésa es quizás la parte mala del
libro, porque todo lo demás es bueno.
Corazón quizás debió llevar por titulo, si pensamos en
el que mejor le queda, El manual del buen
niño. Como ya dije, no es, propiamente dicho, una novela, se trata de
anécdotas que le ocurren a un niño italiano llamado Enrique y que muchas veces
no están conectadas entre sí, pero en cada una de ellas se dan ejemplos de
bondad, gratitud, amor, compasión, compañerismo, obediencia, dadivosidad,
respeto y otras tantas virtudes que tanto hacen falta a veces al ser
humano.
Aparte de
este compendio de anécdotas que le ocurren a Enrique en su escuela, en su casa
y el las calles de su ciudad, Turín, el autor nos brinda las cartas que al niño
le envía casi siempre su padre y algunas veces su madre y hasta su hermana
mayor, para fomentar en él las virtudes antes señaladas. También aparecen los
cuentos mensuales, que llegan a Enrique por medio de su profesor, en los cuales
siempre un niño italiano se convierte en héroe.
Enrique,
pese a ser el narrador, no destaca en las muchas anécdotas que conforman el
libro. Aprendemos a fijarnos más en sus compañeros de escuela por lo que él nos
dice de ellos. Entre éstos destacan Deroso, niño rico, sumamente inteligente y
noble; Garron, no muy brillante, el fortachón del grupo pero más bueno que el
pan y protector de los indefensos; el
Albañilito, la inocencia y la bondad
personificadas; y Garofi, judío que ya desde niño hace negocio con todo lo que
puede tener un precio. Es noble, pero primero que todo para él están sus
negocios.
El éxito de
este libro le vino debido a que muchos creyeron que era el manual ideal para
formar a los niños haciéndolos patriotas, nobles y trabajadores. Quizás también
por esa razón llegó a ser el libro favorito del mismísimo general francés
Charles de Gaulle, quien no se cansaba de elogiarlo.
El libro sin duda alguna hace reflexionar
a los niños que lo leen, y también a los adultos, aunque en menor medida. Es
una obra de culto y tiene su lugar bien ganado. He comprobado que muchos padres
lo ven como el libro ideal para sus hijos, y quizás tengan razón, aunque
yo no la veo tanto así. Creo que la edad más apropiada para leerlo es antes de los doce años, la misma época que creo apropiada para adentrarse en El Principito, porque ya en la adolescencia el interés lo despiertan otras obras, con personajes complejos y llenos de misterio, héroes atormentados porque no quieren serlo.
¿Qué es lo
mejor del libro?
El hecho de
que fomenta en los niños el respeto a sus semejantes, la bondad y otros tantos
valores sumamente importantes.
¿Se lee
rápido?
No tanto
como hubiera querido. Debido a que no es una novela en el estricto sentido de
la palabra me hizo leerlo con cierta pereza.
¿Tiene
algunos defectos?
No es una
obra que brille por su calidad literaria y como fomenta la glorificación de
políticos en niños me ha hecho dudar respecto a si se lo daría a leer a mis
hijos.
¿A quién
podría gustarle?
A niños,
sin duda, más que a los adultos.
¿Deja algún
mensaje?
Sí, muchos,
sería imposible enumerarlos. El libro está lleno de mensajes dirigidos a los
niños.
¿Se
merecería ganar un premio?
Creo que ya
pasó la época en la que este libro podría ser premiado.
7.5/10
Aquí se puede encontrar otra reseña
Madre mía, ya casi no me acordaba de este libro. Lo leí hace la tira...
ResponderEliminarLo tengo en casa desde hace un montón, yo creo que fue de los primeros libros que me regalaron en mi vida y por lo tanto lo guardo con mucho cariño, además tiene unas ilustraciones preciosas, muy acordes con la historia que me encanta
ResponderEliminarbesos
Pues yo no lo tengo ni lo he leído...pero la verdad es que no me acaba de convencer...
ResponderEliminarUn beso!
fue de mis preferidos en la infancia, y de los que les leí a mis hijos cuando estaban aprendiendo a leer...la muerte de la mamá de un compañero fue de los momentos más dramáticos de mi infancia...
ResponderEliminarLa literatura italiana me resulta muy interesante, lo pondré en mi lista
ResponderEliminarMuy bueno! tengo 20 años y lo he leído con gusto. Lo del patriotismo esta presente pero no es peligroso si le adviertes a los niños.
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